Por: Ricardo Elía
A Bangkok, la capital de Tailandia, se la conoce como la “Venecia de Oriente” por estar construida sobre una red de canales y vías de agua. Es una ciudad exótica e intrigante. Pocos saben que es la ciudad más visitada del mundo con más de 21 millones de turistas por año, por delante de Londres y París. Sin embargo, muy pocos de esos visitantes extranjeros sabe que a unos 800 kilómetros al sureste de Bangkok existe una bahía que es un paraíso inimaginable. Se encuentra en la provincia de Phang-Nga, en el mar de Andamán, que forma parte del océano Índico. El escenario es conocido por los cultores del cine. En ese lugar se filmó el número nueve de la saga de James Bond, “El hombre de la pistola de oro” (1974), con Roger Moore, y “La playa” (2000) con Leonardo DiCaprio. Se trata de una bahía espectacular, encerrada entre altos acantilados, protegida de las mareas y monzones, con numerosas islas con playas de arena blanca y una vegetación exuberante. El panorama parece sacado de una novela de Emilio Salgari. Eso sí. Muy pocos están informados que en esa bahía de Phang-Nga hay una isla artificial llamada Koh Panyi que es el hogar de un pueblo pesquero flotante musulmán, construido sobre pilotes sobre el agua. El pueblo, edificado bajo la sombra de un peñón inmenso de piedra caliza, casi vertical, tiene una mezquita y una escuela, y alberga a unas 360 familias que viven de la pesca.
La población de Koh Panyi está compuesta por unos 1700 habitantes descendientes de tres familias de marinos musulmanes malayos de la isla de Java (Indonesia) que llegaron a este lugar hace más de doscientos años. En aquellos días, a los extranjeros no se les permitía poseer tierras en Tailandia, por lo que aquellos musulmanes aventureros construyeron casas sobre pilotes en la bahía. Originalmente, la isla se llamaba Pulau Panyi (en malayo, “isla de la bandera”). Luego la palabrapulau, “isla” se reemplazó por el sinónimo de la lengua thai, koh. La razón de este nombre fue la bandera que colocaron los recién llegados para mostrar que vivían allí.
Koh Panyi, al estar protegida por la bahía, ofrece un lugar seguro con la llegada de los monzones lo que permitió que la comunidad musulmana se desarrollara, viviera de la pesca y que con la llegada de los primeros turistas pudiera recibir unos ingresos extras. Koh Pnayi sobrevivió al tsunami del océano Índico del 26 de diciembre de 2004 gracias a la cobertura que ofrece la bahía con su barrera de arrecifes. A la isla se llega en bote o en lancha desde puertos vecinos. El restaurante de comida marina es un gran éxito aquí, y los puestos del mercado venden recuerdos y postales. Una estancia de una noche en una casa tradicional con una familia local, en una habitación sobre el agua, es una experiencia única en Tailandia y en el mundo. Increíblemente, fue hace solo ocho años, en 2012, que Koh Panyi comenzó a recibir el suministro de agua potable y electricidad.
Actualmente Koh Panyi es una isla famosa en toda Tailandia, no por ser una de las más bonitas y espectaculares sino por la historia del equipo de fútbol juvenil que alberga. Esta historia tan curiosa empezó en el año 1984 cuando un grupo de jóvenes del pueblo quiso empezar a jugar al fútbol en el islote artificial. Como veían que no había espacio natural, decidieron construir en el mar una cancha de fútbol flotante de madera. Así empezaron a jugar y a divertirse. Un día se enteraron de que había un campeonato juvenil y decidieron participar ante el asombro de todo el mundo. Con habilidad y entereza llegaron incluso a semifinales y así comenzó la historia de este curioso equipo de fútbol juvenil llamado Panyi FC. Hoy en día se dispone de un moderno campo de fútbol construido de materiales más resistente pero también con la curiosidad de ser flotante y es una de las atracciones del poblado musulmán.
La isla tiene su propia escuela, un centro de salud y una estación de vigilancia compuesta por un solo policía ya que en el lugar no se registran ningún tipo de incidentes. Hay un restaurante con comida típica compuesta de pescado, verduras y frutas que cumple con el código de regulaciones islámicas.
La hermosísima mezquita Panyi Darussalam que se halla al pie del peñón tiene cúpulas doradas y relucientes mosaicos de color blanco azulado. Hace cuarenta años se produjo una visita extraordinaria a la isla de Koh Panyi. Nada más y nada menos que la de Bhumibol Adulyadej (1927- 2016), conocido como Rama IX, rey de Tailandia (1946-2016).
La atmósfera que se respira en esta isla y el espacio circundante, sumido en la naturaleza, paz y tranquilidad, alejada de la nociva locura urbana es un destino turístico inigualable. La isla de Koh Panyi es uno de esos lugares únicos del mundo que hay que visitar al menos una vez en la vida.