"Me resulta difícil decir por qué se ha llegado a este punto. Según Rusia, y según lo que leemos en los medios de comunicación locales, se debe a una ampliación del conflicto. La paz, por desgracia, parece estar retrocediendo. Creo que el camino es el indicado por el Papa Francisco. Y eso es intentar siempre mantener los canales abiertos, nunca cerrarlos. Sin negar las cosas como son, pero al mismo tiempo sin cerrarse. Para mí, éste sigue siendo el camino más factible".
Son las palabras de Paolo Pezzi, el arzobispo de Moscú y presidente de los obispos rusos, tras el discurso del miércoles del presidente Vladimir Putin en el que anunció la movilización de 300.000 reservistas, la mayor desde la II Guerra Mundial, así como la posibilidad de utilizar armamento nuclear en esta nueva fase del la guerra, en la que las tropas rusas se han visto obligadas a retroceder tras una contraofensiva ucraniana que ha revelado las debilidades estratégicas del líder ruso.
"Rusia corre el riesgo de aislarse, ciertamente", señalo Pezzi desde Moscú al referirse al discurso televisado a toda la nación, el segundo desde que Putin invadió Ucrania el pasado 24 de septiembre. Y añadió que no era ese el que consideraba, sin embargo, el mayor problema: “Me parece que el principal problema es encontrar una salida que no haga que nadie se sienta derrotado. Esta es la mayor dificultad", según informa el SIR.
Pero “es posible hacerlo” añade el arzobispo, "porque es posible salir de una situación de crisis sin ninguna derrota, sólo con el sacrificio de uno mismo". En este sentido, monseñor Pezzi afirma que “es necesario seguir insistiendo en los pasos creativos, como dice Francisco, para emprender nuevos caminos en una senda de paz".
“Concretamente, aquí, la Iglesia católica está tratando de avanzar en esta dirección, es decir, de partir no de un estado de ánimo desconsolado porque las cosas están degenerando, sino de partir del reconocimiento de esos testimonios de amistad y de paz que encontramos, sin embargo, sobre todo entre los fieles. Y en segundo lugar, la humilde y sencilla propuesta de este camino", señala el arzobispo italiano de 62 años y vinculado a Comunión y Liberación.
Fuente: Agencias