La intención de oración de Francisco para agosto es por los líderes políticos. En ese sentido, El Video del Papa de este mes acompaña el pedido de que los políticos “estén al servicio de su pueblo”.
En su videomensaje, que difunde la Red Mundial de Oración del Papa, Francisco admite que, si bien “hoy la política no tiene buena fama, es mucho más noble de lo que aparenta”. Y agrega que solo será posible “avanzar hacia la fraternidad universal” de la mano de “una buena política”.
"Hoy la política no tiene buena fama: corrupción, escándalos, alejada del día a día de las personas". Las primeras palabras del Papa, en el mensaje que introduce su intención de oración para este mes, parecen decir que quienes se dedican a la política, a los ojos de la gente corriente, deben ser vistos con recelo: seguramente tendrán algún interés personal que ocultar.
Sin embargo, el sucesor de Pedro está diciendo algo diferente: está recordando que siempre es posible otro tipo de política, una "Política con mayúsculas", como él la llama, al servicio de la gente y, en particular, de los más pobres. “Todos necesitamos buena política", subraya el obispo de Roma, “la tentación de prescindir de ella, evocada a menudo por populismos de todo tipo, es un gran engaño”.
Un servicio de caridad para el pueblo
La política puede ser un desafío para el carácter moral de quienes participan de ella. Sin embargo, también puede ser una vocación digna de santidad y virtud. En esa línea, al inicio del video, el Papa retoma las palabras de Pablo VI, quien definió a la política como “una de las formas más altas de la caridad, porque busca el bien común”.
Se trata de un sentido social que supera los individualismos en favor de un todo mayor: el pueblo. Es por eso que los cristianos, especialmente los laicos, están llamados a participar de la vida política, para poder construir una sociedad más justa y solidaria.
En su mensaje, Francisco asevera que la buena política no “está encerrada en grandes edificios con largos pasillos”, sino que “escucha la realidad, está al servicio de los pobres y se preocupa por los desempleados”.
Cuando un político no deja espacio para el diálogo, la cooperación y el compromiso con la dignidad de las personas -claves que el Papa destaca en Fratelli Tutti-, no se logra el desarrollo integral de la sociedad. Problemas como el hambre y la pobreza, las guerras o las crisis ambientales, por solo citar algunos, se ven exacerbados por un liderazgo político egoísta y ávido de poder.
Fuente: AICA