Martes 14.01.2025

Devotos peregrinan al "santuario" correntino

La Iglesia acompaña movilización popular alrededor del Gauchito Gil

Se trata de una devoción que el catolicismo "no canoniza ni demoniza", pero fomenta la procesión con la Cruz Gil desde un templo cercano. El obispo de la diócesis donde está el "santuario" decidió levantar capillas en la cercanía y bendecir a los fieles.
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Como cada 8 de enero, cuando se recuerda la muerte del "Santo del Pueblo", los fieles peregrinan hasta los santuarios, donde sea que se encuentren a lo largo del país. También están los que llegan hasta el histórico punto de culto ubicado en el cruce de las rutas 119 y 123, a 8 kilómetros de Mercedes (Corrientes) y a 243 de Resistencia (Chaco).

Para recordar a esta figura que genera una profunda devoción son muchos los que lo homenajean con velas rojas en distintos lugares del país, pero son mucho más aún los que se acercan a su santuario en Mercedes, provincia de Corrientes.

Reconocido como un “santo popular”, al Gauchito Gil se lo considera una figura religiosa a pesar de que no está comprendido dentro de la liturgia oficial católica ni en la evangélica.

Su trascendencia, en este sentido, se debe a la leyenda que hay detrás de su figura y una vida que trae aparejada una historia de milagro y muerte.

Se sabe poco con certeza del gaucho Antonio Mamerto Gil Núñez. Nació en Pay Ubre, cerca de Mercedes, en la provincia de Corrientes. Fue en algún momento del siglo XIX. Para algunos, era un cuatrero, un fugitivo. Para otros, era "Robin Hood", gaucho justiciero, vengador de paisanos.

Dicen que lo condenaron por desertor, en la época de las guerras entre colorados y celestes. Tal vez lo fusilaron, o lo degollaron colgado por los pies de un algarrobo.

Antes de morir, le dijo al sargento que lo ejecutaría: "No me mates, que te va a llegar una carta que dice que soy inocente". El verdugo respondió: "No te vas a salvar" y el Gauchito dijo: "Cuando llegue la carta vas a recibir la noticia de que tu hijo está enfermo y morirá; rezá en mi nombre y tu hijo se va a salvar".

Después de matarlo, el sargento volvió a su casa y encontró a su hijo enfermo. Rezó por él al Gauchito Gil y su nene se curó.

Desde entonces, el lugar donde murió el Gauchito se convirtió en santuario de peregrinación. Allí, año a año miles de personas se acercan para rendirle homenaje y dejar sus ofrendas: oraciones, velas y cintas rojas.

Mito o leyenda, en su provincia natal se lo venera desde hace más de cien años y el culto se extendió al resto del país.

Por haber sido liberal, el Gauchito Gil es identificado con el color rojo. Por eso los devotos llevan banderas de ese color y le ofrendan velas, flores, cruces y frutas.

Para hacerle un pedido al gauchito, la costumbre dice que hay que escribir en una cinta roja lo que se necesita y dejarla por la noche sobre la rama de un árbol, de un alambrado o en un palo clavado en la tierra.

La Iglesia acompaña a los peregrinos de la Cruz Gil
El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecín, envió una carta pastoral a los peregrinos de la Cruz Gil, ubicada muy cerca del "santuario" de la localidad correntina de Mercedes, en la que enuncia la intención del pastor diocesano de "peregrinar junto a ustedes con devoción, el camino hacia la Cruz, nuestra única esperanza".

"Como diócesis de Goya, nos propusimos centrarnos en Jesucristo, realizando todo con los jóvenes, siendo una Iglesia en salida misionera", explica y añade: "Jesús muerto en la cruz y resucitado es el centro de nuestra fe y núcleo de nuestra esperanza".

En los días previos hubo un triduo en el espacio donde se construye el templo de la Santísima Cruz. Allí, este miércoles a las 6, el presbítero Ramón Espinoza, presidió la misa para los peregrinos y durante todo el día habrá bendición de imágenes religiosas y se escucharán confesiones.

El sacerdote, que anima esta pastoral junto con el presbítero Luis Adis, se entrevistó hace poco con el Papa Francisco, quien le sugirió: "Ánimo y adelante. Recen por los difuntos porque es una obra de misericordia e incluyan a todos, todos, todos".

Fuente: agencias