“Santo Padre, por el bien de la Iglesia, anule Fiducia Supplicans". Esta es la petición que, a través de Chance.org, han puesto en circulación el pasado 31 de diciembre un grupo de sacerdotes españoles para recabar firmas con la finalidad de que, apenas dos semanas después de su publicación, el papa Francisco deje sin efecto la declaración de Doctrina de la Fe “sobre el sentido pastoral de las bendiciones”, documento que posibilita la bendición de parejas en situación irregular, aunque subrayando que tal acto no pueda considerarse una unión sacramental.
Los cuatro sacerdotes promotores -a los que se han unidos otras 19 personas consagradas y laicas- fundamentan su solicitud en su adhesión “a la verdad revelada, recogida en la Biblia y en la Tradición e interpretada por el Magisterio secular de la Iglesia”, por lo que estiman que “bendecir parejas en situación irregular o en convivencia homosexual, aunque sea de forma extralitúrgica, contradice el plan de Dios” y por lo que, “en conciencia no podemos aceptar el reconocimiento de este tipo de bendiciones”.
Esta declaración, que en la práctica supone no aplicar cuando les sea solicitada conforme a lo establecido en la nota doctrinal dicha bendición pastoral, está encabezada por 'el clan de Toledo', un grupo de sacerdotes salidos de las diócesis primada (tres de ellos) y de Cádiz (el que ha iniciado esta petición a través de las redes sociales): José Manuel Alonso Ampuero, sacerdote diocesano de Toledo, fidei donumen Lurin (Perú); Julio Alonso Ampuero, sacerdote diocesano de Toledo, fidei donum en Lurin (Perú); José María Cabrero Abascal, sacerdote diocesano de Toledo (España); y Antonio Diufaín Mora, sacerdote de la diócesis de Cádiz y Ceuta (España). A ellos se han unido como promotores ante esta insólita iniciativa varias consagradas y laicos de las diócesis de Cádiz, Toledo, Sevilla, Perú, México y los Estados Unidos.
Dos días después de realizada esta petición pública, otro pastor salido de Toledo, y ahora obispo de prelado de Moyobamba, Rafael Escudero López-Brea, hacía público un ‘mensaje pastoral’ “ante el desconcierto sin precedentes provocado por la Declaración Fiducia supplicans en el clero y muchos fieles de esta Prelatura y de tantos lugares del orbe católico”.
Llegado a Perú en 2004 con el primer grupo de sacerdotes diocesanos de Toledo que atienden la prelatura de Moyobamba, y consagrado dos años después obispo por el entonces cardenal primado, Antonio Cañizares, Escudero asegura en su carta a sus sacerdotes, religiosos y fieles que “no pocos hermanos en el episcopado y sacerdotes, contraviniendo la moral objetiva de la Sagrada Escritura y de la Sagrada Tradición, llevan mucho tiempo confundiendo al pueblo de Dios con la bendición indiscriminada de estas uniones objetivamente desordenadas y por lo tanto pecaminosas, incurriendo en horrendo sacrilegio”.
“Bendecir a las parejas en una situación irregular y a las parejas del mismo sexo es un abuso grave del Santísimo Nombre de Dios, que invocan sobre una unión objetivamente pecaminosa de fornicación, adulterio, o aún peor de actividad homosexual”, afirma en su mensaje.
Por eso, asegura el obispo Escudero que, “ante la falta de claridad del documento, debemos seguir la praxis ininterrumpida de la Iglesia hasta la fecha, que es bendecir a toda persona que pide una bendición, y no a las parejas del mismo sexo o en situación irregular”.
Fuente: RD