Isaac Murphy fue elegido sexto abad de la abadía benedictina de San Anselmo en Manchester, New Hampshire (EEUU), el pasado 17 de junio. Hasta ahí, todo normal. Lo que ya se ha convertido en noticia es que se trata del primer abad no ordenado sacerdote desde que el papa Francisco anunció en 2022 que los hermanos laicos pueden dirigir comunidades religiosas de sacerdotes y hermanos con permiso del Vaticano. Y también es noticia que se trata del primer abad no ordenado en la historia de los Estados Unidos, tal y como señala Katholisch citando al NCR.
"Hemos elegido a la persona adecuada para la comunidad", afirmó el hermano Francis McCarty, pero advirtiendo que con ello, la comunidad benedictina no pretendía hacer ninguna declaración de intenciones. "Elegimos al hermano Isaac porque será un buen abad”.
Elegido por sus hermanos a finales de abril, el abad presidente de la congregación benedictina responsable, Jonathan Licari, tuvo que pedir al Vaticano una exención para completar la elección, que tardó en llegar seis semanas que se les hicieron largas.
Y es que "el derecho canónico estipula que normalmente sólo el clero puede ser elegido superior mayor de órdenes religiosas que incluyan miembros tanto ordenados como no ordenados", pero en mayo de 2022, en una rescriptio, concedió una excepción a la norma y otorgó al Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólicala autoridad para permitir esos nombramientos o elecciones, "paso que fue visto como una apertura general de puestos de liderazgo a órdenes de los laicos".
Benito de Nursia tampoco era clérigo
El nuevo abad no considera que su condición de laico sea un obstáculo para la gestión del monasterio. El autor de la Regla de la Orden Benedictina, san Benito de Nursia , tampoco recibió consagración alguna. "Según el presidente de la congregación, Licari, la elección de Murphy es una gran oportunidad para la asociación porque abre la puerta a personas más cualificadas".
Aunque esta nueva situación con un laico al frente obliga a reconsiderar ciertos hábitos litúrgicos, dado que "tradicionalmente el abad siempre presidía la misa de Navidad en la abadía, pero esto ya no es posible debido a su falta de ordenación. En el futuro, posiblemente se podría hacer una distinción entre 'presidir' y “'celebrar', algo similar a lo que esta haciendo en la actualidad el papa Francisco en algunas ceremonias religiosas.
Fuente: RD